El Islam y la democracia americana: es hora de que los musulmanes ingresemos en el movimiento conservador
Los musulmanes se esconden en América y siguen permaneciendo en silencio sobre el terrorismo y la corrupción del mundo musulmán. Debemos denunciar categóricamente el terrorismo y la corrupción social. Los musulmanes americanos deben redefinir el Islam del siglo XXI.
América está metida hoy en dos guerras en sendos países musulmanes – Afganistán e Irak. Además, el Presidente iraní Mahmoud Ahmadinejad amenaza a Occidente y su apoyo a Israel, sobre todo con la búsqueda de armamento nuclear.
El mundo musulmán está definido por regímenes despóticos, conflictos armados, terror contra civiles y violencia sectaria. El mundo musulmán parece vacío de dinamismo espiritual e intelectual. Hemos permitido que el Islam quede relegado a los márgenes de la civilización humana.
Aquí en casa, hay una elevada probabilidad de que células terroristas durmientes estén planeando la masacre de civiles americanos y la destrucción de instalaciones económicas y militares clave, amenazando la seguridad nacional de América.
Nosotros, en la comunidad musulmana, tenemos que reconocer a América como república fundada sobre valores judeo-americanos. Y es imperativo, después del horror del 11 de septiembre del 2001, que la comunidad musulmana americana redefina el Islam en armonía con la democracia americana y su herencia judeo-cristiana.
Hoy, los musulmanes americanos tienen una gran oportunidad de redefinir el Islam como religión vibrante capaz de estar a la altura de los desafíos sociales, políticos y económicos de un siglo XXI globalizador. Los musulmanes americanos pueden jugar un papel particularmente productivo, ingresando en la corriente conservadora americana.
América, al igual que la comunidad islámica global, está metida en una lucha por definirse en mitad de un rápido cambio cultural – una fusión. América encara un conflicto nacional en el que los conservadores se oponen a un secularismo radical, los excesos del materialismo y las fuerzas del socialismo “progresista”.
En la corriente conservadora americana, los musulmanes encontrarán otros grupos religiosos tales como católicos, judíos ortodoxos y conservadores, y una representación muy fuerte del movimiento evangélico protestante.
Entrando en el movimiento, los musulmanes encontrarán un sustrato común basado en valores sociales y religiosos. Abarca un fuerte compromiso con creencias religiosas básicas, así como con la familia tradicional, la comunidad, y la prosperidad socio-económica.
Dada la presente crisis dentro de ambas culturas, los musulmanes saben que existe una sociedad que puede existir entre América y el Islam. Y dentro de esta relación mutua, los musulmanes pueden ayudar a mejorar lo mejor de la herencia monoteísta judeo-cristiana. A su vez, los musulmanes americanos pueden reformar el Islam con vistas a estar a la altura de las necesidades sociales y económicas de su comunidad en el futuro.
En las elecciones presidenciales del 2000, la comunidad musulmana apoyó firmemente al Presidente George W. Bush y al partido Republicano. En el 2004, sin embargo, la comunidad musulmana apoyó de manera aplastante al candidato Demócrata John Kerry, migrando del partido Republicano. Hoy, solamente el 12% se llama Republicano, mientras que el 50% se considera Demócrata y el 31% independiente.
¿El motivo? Tras el 11 de Septiembre, la comunidad musulmana reaccionó negativamente a las políticas del Presidente Bush en la guerra global contra el terror. La USA Patriot Act, por dar un ejemplo, fue un pretexto para el pánico y la histeria dentro de la comunidad musulmana americana. Las organizaciones musulmanas clave hicieron causa común para fomentar el terror dentro de la comunidad musulmana americana.
La directiva musulmana auto-establecida de América se disfraza de “defensa de los derechos civiles”, pero no representa intereses más especiales que los grupos que emplean tácticas de miedo para lograr fines políticos. El estamento islámico de América es incapaz de aunar el Islam con la corriente post-11 de Septiembre en América.
El Presidente Bush hace una distinción clara, afirmando que América está en guerra contra el terrorismo - América no está en guerra con el Islam. Sin embargo, muchos líderes de la comunidad musulmana escogen no educar a los musulmanes sobre esta distinción.
Además, gran parte de la presente directiva musulmana practica la apología de las organizaciones terroristas. Muchos en las organizaciones, en virtud de las tácticas de presión y propaganda, minan con eficacia la seguridad nacional.
Si la comunidad musulmana americana continúa apoyando a líderes desacreditados y adoptando una agenda progresista-socialista antitética con la democracia americana, el Islam continuará siendo irrelevante para los americanos de buena voluntad durante otro siglo más.
La comunidad musulmana debe permanecer resuelta frente al terrorismo. La comunidad musulmana americana debería pedir el final de todos los conflictos armados que implican al mundo musulmán. Los musulmanes americanos deben adoptar un papel más activo a la hora de aportar soluciones innovadoras al final del derramamiento de sangre y la violencia que afectan al mundo musulmán.
También debemos mostrar firme apoyo público a los valientes hombres y mujeres en las fuerzas armadas norteamericanas. Rendir tributo a los hombres y mujeres que arriesgan sus vidas por las libertades de las que disfrutan los musulmanes de América reforzará nuestro vínculo con la sociedad americana.
Colaboraciones nº 1180 | 1 de Septiembre de 2006
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