Ares anuncia que los cambios en política penitenciaria se aplicarán de forma individual

Cuando al portavoz del PSE en la Comisión de Derechos Humanos del Parlamento de Gasteiz le preguntaron ayer sobre la negativa a transferir la competencia en materia penitenciaria, Rodolfo Ares dijo que no podía hablar en nombre del Gobierno español. Pero apenas unos minutos antes había anunciado cuándo y en qué condiciones el Ejecutivo de Zapatero cambiará su política penitenciaria. Y no parecía que Ares hablara de oídas.

En la Comisión parlamentaria se debatía una propuesta de Ezker Abertzalea exigiendo la libertad de Iñaki de Juana por haber cumplido ya la integridad de su condena. Cuando le tocó su turno al PSE, Rodolfo Ares fijó lo que pareció ser la doctrina oficial del Gobierno español en su estrategia para con los presos políticos vascos.

Primero apuntó que éste era un tema sensible, que debe ser abordado con «sosiego y tranquilidad». Después, a pesar de afirmar que «los presos no están en el tablero de ajedrez de la política del Gobierno», dejó claro que «la política penitenciaria está vinculada a la política antiterrorista».

Por ello, Ares aseguró que lo que se tenga que hacer en política penitenciaria «tendrá que ser fruto del acuerdo y de un diálogo sosegado para que contribuya a conseguir la paz y la libertad».

El portavoz del PSE aseguró que «el Gobierno de España está haciendo una política penitenciaria seria, responsable, que se modificará cuando, fruto del diálogo y del proceso de paz, se constante de manera fehaciente que contribuye a acabar definitivamente con el terrorismo y conseguir definitivamente la paz».

A continuación, Rodolfo Ares anunció que «las decisiones que se tengan que adoptar serán de carácter individual y con la aplicación estricta de los márgenes de la ley y teniendo en cuenta la actitud y el comportamiento de cada persona».

En un momento previo de su intervención, había apuntado también que «con la paz y la libertad asentadas definitivamente, el sistema democrático sabrá perdonar y ser generoso con quienes se arrepientan y quieran reinsertarse en la sociedad democrática».

Aseguró además que los cambios «no serán en absoluto fruto del chantaje, de presiones, manifestaciones ante sedes socialistas, ni mucho menos ­enfatizó el portavoz del PSE en la Comisión, Rodolfo Ares­ de actos vandálicos y terroristas como los cometidos recientemente en el Ayuntamiento de Pasaia».

 

Gara, 10 de octubre de 2006