LA AVT, ANTE LOS 40 AÑOS DE TERRORISMO DE ETA

 

Madrid, 7 de junio de 2008.- La AVT quiere expresar en el día de hoy, en el 40 aniversario del primer atentado oficial de ETA, su cercanía y solidaridad con la familia del Guardia Civil José Pardines, asesinado en Guipúzcoa.

 

Pardines tenía 25 años. Hijo y nieto de guardias civiles. En la tarde del 7 de junio de 1968, le tocó trabajar, junto a su compañero Félix de Diego Martínez, en un control en la carretera Nacional I, Madrid-Irún, en la entrada de Villabona (Guipúzcoa). Allí encontraría la muerte a manos de Javier Etxebarrieta Ortiz, 'Txabi', e Iñaki Sarasketa.

 

La AVT quiere unirse al dolor que todavía causa el recuerdo de José Pardines en la Guardia Civil, cuerpo que como defensor de la libertad de nuestro país ha sido perseguido por la banda terrorista ETA. Pardines fue el primero de una larga lista, más de un centenar, que han perdido la vida a manos de los etarras. Siempre que nos acordamos de las victimas nos invade un dolor desgarrador. La Guardia Civil conserva la dignidad, la decencia, el decoro y su encargo de servicio a España, a las personas, la convivencia pacífica y la concordia.

 

En estas fechas la AVT tampoco quiere olvidar a la familia de la niña María Begoña Urrosi Ibarrola de 22 meses. Muchos consideran que está fue el primer asesinato oficial de la banda terrorista ETA.  Ernest lluch, socialista, Catedrático de la Universidad de Barcelona y otra victima de la ‘mafia’ etarra, escribía un informe en el que ponía que el 18 de junio de 1962 una bomba de ETA afectaba a la menor causándola “quemaduras en ambas piernas y brazos, heridas contusas en pierna y pie izquierdos y quemaduras en la cara”, ingresando en estado grave en la clínica Perpetuo Socorro. Al día siguiente informa de su muerte a primeras horas de la noche anterior. Dato que también parece confirmarse en el estudio 'La ética para la paz, los obispos del País Vasco 1968-1992' realizado por el vicario general, de la Diócesis de San Sebastián José Antonio Pagola. En la página 20 de las 352 de la introducción expresa con bastante claridad lo que hasta el momento se había escrito en términos muy imprecisos: “en realidad, parece ser que la primera víctima de una acción terrorista de ETA fue la niña de 22 meses Begoña Urroz Ibarrola, muerta el día 27 de junio de 1960, al hacer explosión un artefacto colocado en la estación de Amara (San Sebastián)”

 

En  esta triste fecha la AVT traslada a toda la sociedad, en nombre de todas las victimas del terrorismo, su afecto y agradecimiento por la cercanía que siempre hemos sentido por parte de ella en los momentos más duros y en los días en el que el recuerdo de lo seres queridos, que se nos arrebataron, se hacía más presente.