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Emplazamiento sindical a Zapatero

Emplazamiento sindical a Zapatero

Delegados de los sindicatos ELA, LAB, ESK, STEE-EILAS, ELB, Hiru y EHNE han dirigido un emplazamiento al presidente del Gobierno español, José Luis Rodriguez Zapatero, para que haga una apuesta firme por la resolución del conflicto. En un momento en el que algunos portavoces políticos se apresuran a endosar responsabilidades en vez de hacer diagnósticos veraces sobre los factores que han llevado a vía muerta al proceso, el mensaje de los sindicatos tiene, de entrada, un valor clarificador. A la par de reclamar a todos los agentes que elijan la vía de la solución, los sindicatos señalan las causas mayores del actual empantanamiento, cuya superación es indispensable para reflotar el proceso de diálogo.

En este sentido, los sindicatos vinculados al Foro de Ibaeta son taxativos al reclamar que desaparezcan las agresiones a los derechos, al entender que las actuaciones con leyes, sentencias, prórrogas de penas de prisión... se han demostrado como factores contrarios a un proceso de resolución. «Después de la guerra sucia, ha llegado la ley sucia». Con esa significativa expresión resumía el secretario general de ELA, José Elorrieta, lo actuado en los últimos meses, haciendo hincapié en la situación que viven los presos vascos, auténtico termómetro de la falta de compromiso con el proceso demostrada por el Gobierno de Rodríguez Zapatero.

Sin duda, el diagnóstico realizado por los sindicatos engarza con el sentir de una mayoría de la sociedad vasca, para la que es evidente que el inmovilismo de Madrid es el factor que ha causado el perjuicio más grave al proceso, hasta el punto de situarlo al borde del precipicio. El potencial de ese mensaje sindical es mayor si se tiene en cuenta que ese diagnóstico común se realiza por unas centrales sindicales que no tienen el mismo grado de identificación respecto a un proceso hacia cuyo modelo ha mostrado reservas el sindicato ELA.

Desde la diferencia, pero con la premisa compartida de la defensa de los derechos, los sindicatos dan de nuevo un paso al frente. Lo hacen en un momento en el que es preciso sumar energías para que ante los sectores que ponen cadenas al proceso de solución democrática aparezca como una evidencia indiscutible que quienes persisten en la vía de la imposición, que sólo causa sufrimiento y frustración, pierden contacto con una ciudadanía, la vasca, que defiende mayoritariamente soluciones basadas en el diálogo y en el derecho a decidir. -

Editorial de Gara, 15 de diciembre de 2006

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