Blogia
Foro El Salvador

La izquierda abertzale deduce que el PNV avala la partición

La izquierda abertzale deduce que el PNV avala la partición El PNV no llegó ni a los mínimos del preámbulo del llamado Plan Ibarretxe durante las reuniones a tres bandas que mantuvieron junto a la izquierda abertzale y el Partido Socialista, según ha sabido este diario en fuentes independentistas, que añaden que en estos meses se ha constatado que «los jeltzales, junto a los socialistas, quieren mantener la partición territorial" y rechazan la propuesta de la izquierda abertzale.

Después de 22 reuniones mantenidas desde junio de 2006 hasta el pasado mes de marzo, la izquierda abertzale ha llegado a la conclusión de que el PNV -al igual que el Partido Socialista- quiere que la partición territorial continúe, que por esta razón fue imposible alcanzar un acuerdo en otoño y que por la misma rechazan ahora la propuesta de autonomía a cuatro con derecho a decidir.

Tanto en los últimos días como con anterioridad, se ha especulado insistentemente con que en aquellos encuentros se logró algún tipo de acuerdo entre la izquierda abertzale, el PNV y el Partido Socialista, que habría sido abortado por un endurecimiento de las posiciones de Batasuna que los jeltzales imputan sin duda a injerencia de ETA.

 

Sin embargo, fuentes independentistas que conocen aquellos encuentros han señalado a GARA que «en aquella dinámica a tres bandas no se acordó ningún compromiso político. Se dieron algunos pasos, pero los obstáculos puestos por jeltzales y socialistas en los apartados relativos al derecho a decidir y a la vertebración territorial impidieron el acuerdo».

 

A tenor de las informaciones recabadas por este diario, durante esos encuentros el PNV no mantuvo ninguna posición política propia, limitándose a amparar, a lo sumo matizar, los postulados que el Partido Socialista ponía sobre la mesa. Tal fue así que los jeltzales no llegaron en sus planteamientos ni a los mínimos que se recogen en el preámbulo del Nuevo Estatuto Político para la CAV aprobado por el Parlamento de Gasteiz el 30 de diciembre de 2004.

 

Las bases propuestas por la izquierda abertzale pivotaron, por un lado, «sobre el derecho a decidir y la capacidad de poder elegir entre todos los proyectos políticos, incluido el independentista» y, por otro lado, sobre «la posibilidad de que los ciudadanos y ciudadanas de Araba, Bizkaia, Gipuzkoa y Nafarroa Garaia pudieran construir libremente la vertebración institucional que desearan para estos cuatro herrialdes».

 

«Primero la paz»

 

Las fuentes independentistas consultadas contextualizan la posición mantenida por jeltzales y socialistas en estas conversaciones de otoño en la estrategia compartida por ambos partidos desde que el año pasado se abrió la posibilidad de solucionar el conflicto político.

 

La frase del presidente del EBB, Josu Jon Imaz, «primero la paz y luego la política», mostraba con claridad -al entender de la izquierda abertzale- la intención común de PNV y Partido Socialista de vaciar el proceso de contenido político.

 

Reuniones desde junio

 

Para tratar de salvar esta situación, la izquierda abertzale inició en junio una dinámica de reuniones con ambas partes. Las fuentes consultadas detallan que desde entonces se han reunido hasta 22 veces con el PNV, tanto de forma bilateral como conjuntamente con el PSOE.

 

Desde el independentismo se apunta que en la primera de aquellas reuniones ya plantearon al PNV la necesidad de poner en marcha de inmediato el carril político. «Pero en lugar de eso -se lamentan-, los jeltzales, haciendo el juego a los socialistas, se dedicaron a practicar la dilación política hasta otoño».

 

Ante el bloqueo del carril político, a primeros de setiembre la izquierda abertzale lanzó a PNV y Partido Socialista un llamamiento para buscar las bases para un preacuerdo sobre las cuestiones a abordar en una futura mesa de partidos.

 

«Los únicos que no querían»

 

El hecho de que el llamamiento se circunscribiera a PNV y Partido Socialista se explica desde la izquierda abertzale, además de por el evidente peso de ambas fuerzas, «porque, entre todos, eran los dos únicos agentes que no querían comenzar las negociaciones en el carril político».

 

Estas fuentes añaden que en las relaciones que la izquierda abertzale mantuvo con el resto de agentes políticos ninguno, salvo PNV y Partido Socialista, puso inconveniente en la puesta en marcha de una mesa o mesas de partidos para la búsqueda de un acuerdo político que supusiera la superación del conflicto. Y detallan que el consenso alcanzaba a las contenidos básicos sobre los que debía buscarse dicho acuerdo, como son el reconocimiento de Euskal Herria como nación, el derecho de autodeterminación y la posibilidad de optar entre todos los proyectos políticos, el respeto a todos los derechos de la ciudadanía, la vertebración entre los territorios y los instrumentos para articularla.

 

El llamamiento de setiembre tuvo su efecto y en otoño la izquierda abertzale, el PNV y el Partido Socialista entraron en una dinámica de conversaciones que, como se ha descrito con anterioridad, sirvieron para dar algunos pasos, pero no para alcanzar ningún acuerdo.

 

Nuevo intento

 

Tras la falta de acuerdo de las conversaciones de otoño, y después del atentado del 30 de diciembre y de las reacciones iniciales al mismo, la izquierda abertzale recuerda que volvió a lanzar una oferta renovada a jeltzales y socialistas a principios de febrero, basada en una autonomía a cuatro territorios con derecho a decidir.

 

Sin embargo, estas fuentes denuncian que ni PNV ni PSOE han querido entrar a trabajar sobre esta propuesta. Desde la izquierda abertzale se asegura que «no queremos imponer nuestra propuesta a nadie, sino dar respuesta a las raíces del conflicto que históricamente se vienen repitiendo». Para ello, es necesaria una negociación entre todos los agentes y un acuerdo sobre qué contenidos abordar, «y eso es lo que no aceptan PNV y PSOE y la verdadera razón que impide un acuerdo de bases».

 

La izquierda abertzale denuncia que siempre que se presenta una oportunidad de resolver el conflicto -y recuerda Txiberta, Argel y Lizarra- el PNV, en lugar de apostar por el interés común, ha apostado por el propio.

 

La izquierda abertzale sostiene que entre junio y el pasado mes de marzo ha mantenido un total de 22 reuniones con el PNV, tanto de forma bilateral como a tres bandas junto a representantes del Partido Socialista.

 

Iñaki IRIONDO | GASTEIZ

Gara, 27 de abril de 2007

0 comentarios