ZP aprovechará la ruptura de ETA
ETA dice que la tregua está rota. Si durante el "alto el fuego unilateral" han asesinado a tres personas, qué no estarán dispuestos a hacer ahora. Puede hacerlo, de hecho, porque ETA tiene ahora el dinero, los comandos, las armas y el optimismo que no tenía en 2004. Ocho años de Aznar, bien o mal, los aplastaron como a cucarachas. Tres años de zapaterismo han bastado para que sean de nuevo la banda terrorista más peligrosa de Europa. Sólo por eso el Gobierno debería dimitir.
No va a hacerlo. Es más, que nadie se haga ilusiones: esta noticia no cambia esencialmente nada en los proyectos ilustrados del jefe del Gobierno, y le pone ciertas cosas aún más fáciles. Veamos…
En política nacional, Zapatero se va a beneficiar de la indignación popular. Ha sido un año de cesiones tras dos de claudicaciones, y sin embargo el Gobierno pondrá de nuevo los ojos en blanco, hablará de sus esfuerzos por la "pazzzz" y tratará de quedar como la víctima inocente e incomprendida de todo esto. Será creído por muchos.
Respecto a las futuras víctimas, el aparato mediático del PSOE las echará en la cuenta de quienes rompieron la tregua, es decir los "extremistas equidistantes" PP y ANV, Dios nos ampare, y no reconocerá sus culpas esenciales. Además, curiosamente, los más amenazados no son ahora los socialistas sino, como siempre, militares y policías, miembros de UPN y del PP y, singular novedad, algunos del PNV. Los etarras llevan ya unas semanas advirtiendo a los del PNV de que "se libren de su presidente, Josu Jon Imaz, y de su portavoz, Iñigo Urkullu, para impulsar un PNV fuerte y unido que apueste por la resolución política del conflicto". Tomen nota en Sabin Etxea y, por qué no, en Génova.
Por último, la reaparición de los que "defenderán a Euskal Herria con las armas y en todos los frentes" no aclara para nada la situación de Navarra. Que nadie espere que Zapatero opte ahora, por esto, por la unidad nacional y antiterrorista. Es perfectamente capaz, con la coartada de esta ruptura, de pactar con NaBai, ahora más que antes. Al tiempo.
(Nota veterinaria: en efecto, De Juana no es un perro. Los perros no llevan pulsera, salvo quizás en Euskadi, y las raras veces que un perro mata veinticinco personas su destino es sólo uno. Lo digo para ilustración de sus inminentes émulos: no todos somos Zapatero)
Pascual Tamburri
El Semanal Digital, 5 de junio de 2007
0 comentarios